Red Velvet Mini Cake

Vale ya...ya se que no estamos en San Valentín...y que ni siquiera está cerca, como nos recuerdan las temperaturas actuales...Pero es que no se puede planificar cuando llega el amor!!!

En este caso, es amor por un pastel...en concreto, la tarta Red Velvet!

No os riáis, también es un tipo de amor...con la diferencia que el amor normalmente te quita el apetito...este al contrario...enfin, son pequeños detalles sin mucha importancia.

Estas dosis son para una tarta pequeña... dos románticas porciones! Y esto porque yo tengo un molde pequeño con forma de corazón, y me niego a hacer una Red Velvet que no sea con forma de corazón, está claro?!? :)) 

RED VELVET MINI CAKE

Para el bizcocho:

170 gr harina

1/2 tablespoon (media cucharada, unos 7ml) de levadura en polvo

110 gr azúcar

60 gr mantequilla derretida y dejada enfriar

1 huevo

125 gr (1/2 vasito) di yogur natural

1/2 cucharada de Red Velvet Bakery Emulsion Oil de LorAnn (u otro colorante en pasta)

1/2 cucharadita de cacao amargo en polvo

1 sobre de vainillina

Para el frosting:

125 gr de queso crema tipo philadelphia

30 gr de mantequilla a temperatura ambiente

1 cucharadita de esencia de vainilla

125 gr di icing sugar (o azúcar glás)

Con la batidora eleéctrica batimos bien los huevos con el azúcar, después añadimos la mantequilla y el yogur. Incorporamos la harina con la levadura tamizada y la vainillina, y al final añadimos el colorante Red Velvet y el cacao. Dividimos la masa en dos pequeños moldes (o si solo tenemos uno, como en mi caso, hacemos dos horneadas) y ponemos en el horno precalentado a 150ºC durante unos 40 minutos, o hasta que un palillo insertado en el bizcocho no salga limpio.
Mientras tanto preparamos el frosting: en un bol batimos el queso crema con la mantequilla, añadimos la vainilla y el azucar glás, poco a la vez, hasta obtener una crema homogénea.

Cuando los bizcochos estarán fríos, cortamos un poco la parte superior para obtener una superficie llana. Entonces montamos los dos bizcochos como un sandwich, poniendo en el medio una cucharada generosa de frosting. Cubrimos también con frosting y decoramos según nuestra fantasía. 

Yo le puse una rosa hecha en fondant con una técnica supersencilla (ya pondré el tutorial) acabada con purpurina alimentaria...como me gustan estas mariconerías!!!

Con amore,

Sara :)